La cuña de radio es un formato de publicidad que busca impactar y seducir al posible consumidor a través de la voz, el mensaje, la música y los efectos. Para crear una buena cuña de radio se tendrán en cuenta factores como el uso del tiempo o la elección de la voz adecuada.

¿Cómo crear una buena cuña de radio?

El objetivo de una cuña de radio, como otros formatos publicitarios, es dar a conocer un producto, servicio o marca a través de uno de los medios de comunicación más importantes. Pero para conseguir su objetivo, una cuña de radio debe contar con algunas características.

La publicidad en la radio no genera una venta directa como en el caso de los formatos digitales de venta online. Pero es enormemente poderosa para las marcas, porque permite crear un recuerdo en la mente de los consumidores, al que pueden recurrir en un momento de decisión de compra. ¿Nunca has comprado un producto de una marca porque esa marca te genera más confianza o te suena más? Ese es uno de los objetivos de la publicidad.

Incluso, la publicidad bien creada, puede producir una necesidad de compra que antes no existía. Pero, ¿cómo se hace?

Hoy te traemos 5 tips para crear la cuña de radio perfecta.

1. El tiempo es importante

En la radio el tiempo es oro. Las pausas publicitarias suelen ser muy cortas y los mensajes publicitarios deben durar poco tiempo. Lo más normal en publicidad nacional suelen ser cuñas de 15 o 20 segundos, como mucho. En la radio local se pueden extender algo más. Pero el máximo son 30 segundos. Al menos, si quieres que tu publicidad funcione. Cuanto más corta, simple y clara sea, más posibilidades tendrás de que el consumidor recuerde la marca y el mensaje. Las cuñas de publicidad demasiado largas, es uno de los errores de las emisoras locales. Nuestro compañero Raúl lo comenta en este post.

Pero tampoco podemos correr demasiado para intentar meter demasiado texto en pocos segundos. Es más sencillo decir menos cosas, pero con mayor peso. La publicidad se escucha en muchas ocasiones sin prestar mucha atención. Así que no podemos sobrecargar de información nuestro mensaje. Pero para ello, es muy importante el siguiente punto.

2. El texto

Imagina que tienes que decir algo muy importante a una persona muy especial. Pero sólo puedes verla en el trayecto de un ascensor. Pensarías muy bien lo que vas a decir ¿no?. Pues la publicidad funciona igual.

Como tenemos muy poco tiempo, el mensaje debe estar optimizado al máximo. Olvídate de complicadas direcciones web o números de teléfono. Con la tecnología actual, cualquiera puede buscar tu marca en 10 segundos. Lo importante es el mensaje. En 20 segundos un locutor puede decir poco más de 50 palabras. Puede ser interesante incluso, crear un pequeño silencio que invite a la reflexión y llame la atención de nuestra audiencia. En la radio, los silencios no suelen ser habituales y cuando los hay es porque pasa algo.

3. La voz es nuestro embajador

Cuando tengamos nuestro texto bien pensado, un locutor profesional puede ayudarnos a exprimir esos 20 segundos. Aquí entran factores como la entonación o ciertas intenciones que pueden ayudarnos a imprimir un recuerdo en nuestros oyentes.

En un buen texto, se tendrán en cuenta además este tipo de cosas que puede ayudarnos a decir mucho sin decir demasiadas palabras. ¿A que no le hablas igual a tu jefe que a tu pareja?.

4. La música y el sonido

Si tenemos el texto y la voz y todo ello se ajusta al tiempo del que disponemos, nos falta todo lo demás.

El oído es uno de los sentidos que más sensaciones nos provocan y eso se utiliza mucho en la publicidad en radio. Es otro de los registros que podemos utilizar en nuestra cuña de radio para transmitir, igual que con la voz, sensaciones o intenciones que crean un mensaje más completo. Si por ejemplo, queremos recrear una conversación de dos personas en una oficina o en la calle, necesitamos ambientar la escena con sonidos que nos ayuden a meternos en la escena. La música es otro de los elementos que funciona muy bien porque facilita el recuerdo. Es por eso, que en muchas cuñas que escuchan se canta el mensaje.

Una cuña en la que se tengan en cuenta todos los aspectos sonoros puede funcionar mucho mejor. Es más completa y el mensaje cala mejor. Solo con 20 segundos se pueden hacer muchas cosas.

5. La marca

La marca es lo más importante de nuestro mensaje y debe colocarse en el mejor momento de la cuña. No todas las cuñas son iguales y hay que pensarlo bien. Repetir muchas veces algo no va a hacer que se recuerde mejor, pero si la marca aparece con la entonación correcta y en el momento apropiado será más sencilla de recordar.

Debes priorizar siempre la marca o el nombre del producto y recordar lo que hablamos en los puntos anteriores. Un mensaje más sencillo y con menos información es más fácil de recordar.

¿Sabes ya cómo hacer cuñas de radio?

Como hemos visto, cada uno de los elementos que conforman la cuña son importantes y ayudan a que la campaña tenga resultado. Cuando no se tienen en cuenta puede ocurrir el desastre. El importante cuidar el mensaje y el tiempo que vas a usar, elegir un buen embajador de tu marca para poner la voz al anuncio y cuidar mucho la música y el sonido si queremos causar una gran primera impresión.

Podríamos explicarte también cómo hacer una barra de pan, pero lo nuestro es esto. Por eso, si quieres evitar sustos o gastar tu dinero de forma inadecuada, cuando vayas a pedir una barra de pan no nos la pidas a nosotros. Pero si quieres hacer una cuña de radio… eso sí que lo podemos hacer.

Siempre es mejor ponerse en manos de verdaderos profesionales con años de experiencia, que sepan cómo pueden sacar el máximo partido a esos 20 o 30 segundos. En Track Pro llevamos más de 10 años fabricando cuñas de radio, diseñadas a la medida de cada marca y buscando el máximo impacto. Ponte en contacto con nosotros, si necesitas que tu mensaje suene con fuerza y carácter propios.